La sangre de un ser humano y su medio interno, para que sea de buena calidad tiene que tener un pH entre 7,39 a 7,41. Si el medio interno, se acidifica, aparecen síntomas tales como: cansancio, fatiga, dolores articulares, mal humor, irritabilidad, inflamaciones, infecciones recurrentes, insomnio, dolor de cabeza, depresión, problemas digestivos, acidez estomacal y también muchas de las llamadas enfermedades de la civilización como hipertensión, hipocolesterolemia, diabetes, cáncer, sida, reuma, y otras.
Para mantener un PH alcalino es importante evitar en lo posible alimentos extremadamente acidificantes. Se sabe que el origen de muchas enfermedades tiene que ver con un nivel alto de acidificación.
La mala sangre, el estrés, el exceso de adrenalina, la vida sedentaria, una alimentación desbalanceada, la falta de una
buena oxigenación, el exceso de comida, el consumo de alimentos quimicalizados y medicamentos, el pensamiento mecánico, generan acidificación en la sangre.
El consumo de ciertos alimentos y la falta de actividad física, tienen un rol fundamental en este sentido, así como también el no saber equilibrar los diferentes alimentos como para poder compensarlos.
A continuación una lista de alimentos de acuerdo a su rango de acidificación y alcalinidad. Cabe destacar que no se trata de evitar los alimentos acidificantes exclusivamente, sino de saber equilibrarlos y ayudar con otros para que los muy ácidos se equilibren con algo alcalino o preferir los menos ácidos. Una alimentación totalmente alcalina implica falta de nutrientes importantes para la salud.
1) Alimentos alcalinos a consumir
Zapallo, zuchini, zapallito, coliflor, repollo, zanahoria, nabo, rabanito, acuzai, cebollita de verdeo, bardanas, loto, papa, alcaucil, manzana, pera, damascos, sandía, durazno, sal marina, algas marinas, aceite de maíz.
2) Alimentos ácidos a evitar
Bebidas cola, aguas saborizadas, soda, edulcorantes artificiales, café, hierba mate, té negro, alcohol, productos químicos en general, carne roja, embutidos, quesos industrializados, yogur, crema de leche, azúcar, harinas industrializadas, aceites hidrogenados, margarina, chocolate, helados, alfajores, galletitas, papa fritas de paquetes, chisitos, polvo para hacer bebidas, repostería, medialunas, golosinas en general, sal común, pescados de criadero, pollo y huevos de criadero.
3) Alimentos ácidos a consumir cotidianamente, sabiendo equilibrarlos
Cereales integrales (arroz, cebada perlada, mijo, avena, quínoa, trigo), legumbres: soja a través de sus derivados (queso de soja, miso, salsa de soja), garbanzos, poroto aduki, poroto negro, queso de cabra, pescado de mares profundos (abadejo, brótola, lenguado), semillas de sésamo, almendras, nueces, pistachos, castañas de cajú, cebolla, brócoli, ajo.
Los cereales integrales y las legumbres, si bien tienen una cuota de acidez, al masticarlos bien se alcalinizan. Cabe destacar que son alimentos más alcalinos que los hidratos de combustión rápida como harinas, pastas, arroz blanco y que las carnes en general. Es importante consumirlos con verduras alcalinas para compensarlos. La cocción también es una forma de alcalinizar algunos alimentos, por eso las sopas son bien alcalinizantes y tan recomendadas. Las verduras más ácidas, al rehogarlas en aceite de maíz, se alcalinizan. Los productos animales siempre es bueno acompañarlos con alimentos que alcalinicen, como zanahoria, zapallo, repollo, zuchini, achicoria, apio, perejil… Las semillas siempre es bueno consumirlas en ensaladas. Por ejemplo, si consumo tomate es bueno compensarlo con zanahorias y si tomo un jugo de naranja que es ácido, es bueno mezclarlo con zanahoria y/o manzana y/o pera.
4) Alimentos ácidos a consumir moderadamente
Quesos de vaca orgánicos: ricota, roquefort, parmesano, pollo de campo orgánico, carne de animal salvaje, huevos orgánicos, aceite de oliva, tomate, lechuga, rúcula, batata, espinaca, berenjena, ajo, cítricos, melón, uvas, banana.
Estos alimentos se pueden consumir tratando en lo posible de compensarlos con alimentos más alcalinos. Siempre va a ser más alcalino algo de procedencia orgánica, que aquel alimento que contiene químicos.
Cabe destacar que una forma importante de alcalinizar la sangre es a partir de una buena oxigenación. Inhalando y exhalando profundo, especialmente caminando al aire libre entre la naturaleza.
También la sangre se alcaliniza, cuando hay serenidad en nuestra mente. Para ello es importante la meditación, entendida como un estado de atención plena a todo lo que ocurre interna y externamente, sin juicios ni justificaciones.